Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Hans Christian #Andersen

Translate

LA CAMPANA #CUENTOinfantil #Hans_Christian_Andersen #infancia #conciencia

Imagen
  Imagen de  Gerd Altmann  en  Pixabay   Cierta vez, en un pueblo escondido en un hermoso valle, se celebró una gran fiesta. -¡Qué fiesta tan divertida! -comentó un conejillo que, con otros animalitos del bosque, contemplaba el bullicio de las gentes que cantaban y bailaban. De pronto, dominando los ruidos de la fiesta,  se escuchó el tañido de una campana. -¿Dónde estará esa campana? -se preguntaron todos. Pero por más que buscaron, nadie pudo descubrir el lugar en que estaba escondida la campana. El rey no tardó en tomar cartas  en el asunto y ofreció un valioso premio al que descubriese la misteriosa campana. -Al que logre descubrirla -dijo-, le concederé el título de Conde de la Campana. Todas las tardes, al ponerse el sol, se oía el tañido de la campana, una campana misteriosa que nadie sabía dónde estaba, ni quién la tocaba. Un domingo, por la mañana, al salir de misa, dos niños y una niña se dirigieron al bosque a buscar la campana escondida. -¿Sabes dónde está la campana mister

LA SIRENITA #CUENTO_INFANTIL #HANS_CRHISTIAN_ANDERSEN #NIÑOS

Imagen
Imagen de  Dina Dee  en  Pixabay    Hace muchos años, cuando el fondo del mar tenía hermosos palacios de mármol y coral, habitados por sirenas, existió una, la más hermosa de todas. Era la más joven de las seis princesas-sirenas que vivían en aquel palacio encantado en el fondo de las laguas.  Tenía el cutis de rosa y los ojos tan azules como el agua marina; pero se sentía desgraciada. -Mamá -preguntó un día la sirenita a su madre-, ¿ cuándo podremos salir a la superficie para admirar las cosas tan bellas que hay en la tierra? -Cuando tengáis quince años -le respondió su madre-.  Entonces podréis sentaros sobre las rocas a la luz de la luna y admirar los barcos que cruzan los océanos. Pero la pequeña, no pudiendo contener su impaciencia, nadó hacia la superficie sin que nadie la viera. El mar estaba bastante agitado y la sirenita, llena de espanto, vio cómo un barco se estrellaba contra los arrecifes.  De pronto, escuchó la voz de un joven que pedía socorro. La pequeña nadó hacia él y

LA VENDEDORA DE FÓSFOROS #CUENTOSINFANTILES #CUENTOSPOPULARES #ANDERSEN #NIÑOS #navidad

Imagen
                                                         Imagen de  Jo-B  en  Pixabay   Era víspera de Año Nuevo y todo el mundo marchaba apresurado por las calles, llevando paquetes de turrones y golosinas bajo el brazo.  La noche de invierno era fría y la nieve caía copiosamente. Todos paseaban felices pensando en la fiesta que iban a celebrar en sus casas.  Todos, menos una pobrecita niña vendedora de fósforos, quien, por desgracia, había perdido las zapatillas viejas de su mamá al correr para salvarse de un atropello. La nieve que caía sobre su rubio cabello lo había ondulado graciosamente en torno a su cara. Dentro de su roto delantal, llevaba unas cuantas cajas de fósforos, que ofrecía a los que paseaban; pero éstos, no le hacían ningún caso. Entonces ella decidió marchar sin rumbo fijo, curioseando en los atrayentes escaparates llenos de cosas riquísimas. De tanto caminar se sintió muy cansada y se sentó en un tibio rincón de una calle.  No podía regresar a casa porque, como no

EL RUISEÑOR #cuento_infantil #niños #hans_christian_andersen #china #bondad

Imagen
  Imagen de  Alyn  en  Pixabay En el maravilloso país de la China existió hace mucho tiempo, un emperador que tenía una hija llamada Litay Fo.  El monarca era sordo y por lo tanto, no conocía las delicias de la música ni los sonidos más bellos.  No podía apreciar, por ejemplo, los hermosos trinos de los pájaros. Una tarde en que Litay Fo se paseaba por los exóticos jardines del palacio, escuchó sorprendida el canto de un pajarillo, que jamás antes había oído. Desde la rama más alta de un loto en flor, un ruiseñor hacía increíbles requiebros con sus trinos. -¡Qué bien cantas! -dijo emocionada la hija del emperador. -Soy un humilde ruiseñor -dijo el ave- que deseaba verte hace tiempo.  Mis hermanos me advirtieron que no entrara en este palacio porque el emperador sólo mima a los pájaros de vistoso plumaje y, en cambio, desdeña a las aves cantoras pero yo sabía que tú no me rechazarías. La princesa le dijo que desde ese momento serían amigos y que le prometiera que volvería a la misma hor

EL AVE FÉNIX #CUENTO_INFANTIL #ANDERSEN #inmortal

Imagen
Imagen de  redprick2001  en  Pixabay   En el jardín del Paraíso bajo el árbol de la Sabiduría, crecía un rosal.  Al cobijo de una de sus rosas nació un pájaro; su vuelo era como un rayo de luz, magníficos sus colores, arrobador su canto. Pero cuando Eva tomó el fruto de la ciencia del bien y del mal, y cuando ella y Adán fueron arrojados del Paraíso, de la flamígera espada del ángel cayó una chispa en el nido del pájaro y le prendió fuego.  El animal murió abrasado, pero de un huevo rojo salió volando otra ave, única y siempre la misma: el Ave Fénix, única en el mundo. El pájaro vuela en torno a nosotros, raudo como la luz, espléndido de colores, magnífico en su canto.  Cuando una madre está sentada junto a la cuna del hijo, el ave se acerca a la almohada y, desplegando las alas, traza una aureola alrededor de la cabeza del niño.  Vuela por el sobrio y humilde aposento, hay resplandor de sol en él y sobre la pobre cómoda exhalan su perfume unas violetas. Pero el Ave Fénix no es sólo el

PEGAOJOS #bondad #dormir #sueños #CUENTOSINFANTILES #HANS_CHRISTIAN_ANDERSEN #NIÑOS #CUENTOSPOPULARES

Imagen
  Imagen de  Quentin088  en  Pixabay   Le llamaban Pegaojos y decían que nadie en el mundo sabía los cuentos como él. Pegaojos era un duendecillo que todas las noches subía las escaleras despacito, despacito, pues iba descalzo, sólo con calcetines, abría las puertas sin hacer ruido y, ¡chitón!, vertía en los ojos de los pequeñuelos leche dulce, con cuidado, con cuidadito, pero siempre bastante para que no pudieran tener los ojos abiertos y, por tanto, verle a él.  Se deslizaba por detrás, les soplaba suavemente en la nuca y se quedaban dormiditos. A los niños no les dolía, pues Pegaojos era su mejor amigo y sólo pretendía que estuviesen quietos.  Para ello era mejor aguardar a que estuviesen acostados.   Cuando los niños estaban ya dormiditos, Pegaojos se sentaba en la cama.  Iba muy bien vestido con un traje de seda; es imposible decir de qué color, pues tenía destellos verdes, rojos o azules, según sus movimientos.  ¡Ah! llevaba dos paraguas, uno debajo de cada brazo. Uno de estos pa

LA CAJA DE YESCA #CUENTOSPOPULARES #CUENTOSINFANTILES #ANDERSEN #NIÑOS

Imagen
  Imagen de  Luc Mahler  en  Pixabay Un soldado que había sido licenciado, retornaba a su casa cantando una canción de cuartel, cuando se le presentó en el camino una feísima mujer, que le dijo: -¡Buenas tardes, soldado!  ¿Quieres ser rico?  Pues métete dentro de ese tronco hueco y cuando hayas bajado al fondo, verás las puertas de tres habitaciones.  En la primera hay un perro con ojos como platos. encima de un cofre lleno de monedas de cobre.  No te hará nada si le colocas encima mi delantal de cuadritos, y podrás coger cuanto desees.  En la segunda, verás un perro con ojos como ruedas de molino encima de un cofre lleno de monedas de plata.  Ponlo sobre mi delantal y coge lo que quieras; y por fin, llegarás a la tercera habitación, defendida por un perro con ojos como torres, al que podrás inutilizar igual que a los demás, y tomar todas las monedas de oro que gustes. -¿Y tú? -exclamó el soldado-, ¿no quieres dinero? -Me contento con una caja de yesca que hay sobre una mesita.  Tráeme

PULGARCITA #CuentosInfantiles #Andersen #Niños #Cuentospopulares

Imagen
Imagen de  Please Don't sell My Artwork AS IS  en  Pixabay   Erase una mujer que anhelaba tener un niño y consultó con una vecina que tenía fama de hechicera. -Eso es muy fácil -dijo la vecina con fama de ser hechicera-.  Planta un grano de cebada en una maceta y verás que maravilla resulta. Obedeció la mujer y brotó en seguida una flor grande y espléndida parecida a un tulipán.  Era tan hermosa que la mujer la besó e inmediatamente los pétalos se abrieron, dejando ver en su interior a una niña pequeñísima, linda y gentil, no más alta que un dedo pulgar, y por ello la llamaron Pulgarcita. La cuna de la niña era una cáscara de nuez.  Una noche, mientras la niña dormía, un sapo saltó al interior de la habitación a través del cristal roto de la ventana.  Al ver a Pulgarcita, se dijo: -¡Sería una bonita esposa para mi hijo! Y cargando con la cáscara  de nuez, saltó al jardín por el mismo cristal roto y fue hasta el cenagal donde vivía con su hijo.  ¡Uf, qué feo y asqueroso era el bicho

Cuentos infantiles "ENTRA Y LEEME"

REGISTRO DE AUTORES

REGISTRO DE AUTORES