EL VIEJO Y LOS PÁJAROS DEL TRUENO #leyendas #america #lecturajuvenil #aventuras
Una mañana Pielparda, el coyote, acababa de desayunar y su fino olfato le dijo que venía alguien. Se sentó y esperó. -Es Nu-la-kin-nah -dijo cuando le olió más cerca. Era, efectivamente, el Viejo, que le saludó diciendo: -Te he estado buscando; ven conmigo. Pielparda le siguió mientras oía como quien oye llover, la charla interminable del Viejo, y no se dio cuenta de que le decía: -Vamos a pasar al lado de un pino muerto. No tiene ramas, está desgajado y en lo alto tiene un nido muy grande. Cuando pasemos por allí, oirás unos ruidos raros; pero no los escuches y continúa como si no los hubieras oído. Pielparda se había quedado atrás, comiendo un ratón, y no se preocupó de enterarse de nada. Cuando llegaron junto al pino, oyó unos ruidos muy extraños: -¡Kin-nak nak-kin, kin-nak nak-kin! Pielparda miró hacia arriba y vio un nido con dos pájaros negros, eran los hijos de los Pájaros del Trueno, que hacían aquel ruido. Pielparda, muy divertido, quiso imitarlos. Repitió su